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No más muertes de personas refugiadas por pasividad e indolencia

Fotografía: Guillaume Pinon

No más muertes de personas refugiadas por pasividad e indolencia

Atenas, 30 de septiembre de 2019.- La crisis de las personas refugiadas ya es una crisis humanitaria en Lesbos, donde viven más de 1.000 menores no acompañados. Mientras las mafias siguen buscando nuevos puertos en el Egeo, la ausencia de una política de la Unión Europea que regule la recepción de solicitantes de asilo se traduce en una constante y atroz pérdida de vidas humanas.
Esencial

Médicos del Mundo hace un llamamiento a la Unión Europea para que asuma sus responsabilidades en materia de asilo y vele por el respeto al derecho internacional humanitario.

El naufragio de una embarcación en la isla de Inuses, a unos 2 km de la costa noreste de la isla griega de Quíos, se ha cobrado la vida de 7 seres humanos, 5 niños pequeños -uno de ellos, todavía bebé- y 2 mujeres.

El incendio en el centro de identificación de Moria (Lesbos) que ha provocado la muerte de un adulto y posiblemente también de otros 2 menores, según los testimonios recogidos en la zona, sacar de nuevo a la luz las condiciones de vida inhumanas del campo. De hecho, todavía no se sabe a ciencia cierta cuántas personas quedaron atrapadas en el contenedor quemado ni cuántas victimas de esta tragedia hay realmente.

La evacuación de Moria de los colectivos más vulnerables es una cuestión de vida o muerte. Igual de urgente es garantizar el acceso a la atención médica y respetar la dignidad y los derechos humanos de quienes allí permanezcan.

En esta crisis, no hablamos de números, sino de personas. Sin embargo, las cifras sirven para visibilizar una realidad demoledora. En Moria hay más de 13.000 personas a pesar de que esté habilitado para 3.000. La población refugiada total en Grecia es de 26.273 personas para una capacidad de alojamiento de 6.338.

Como ONG presente en Lesbos desde 2013 para ofrecer atención sociosanitaria, hacemos un llamamiento al Gobierno griego para que afronte el problema, asegure de manera inmediata la protección necesaria para la población más vulnerable y agilice los procesos de solicitud de asilo.

La llegada de personas refugiadas no va a parar mientras continúe habiendo conflictos armados, crisis humanitarias y desastres naturales. Es hora de llevar a cabo acciones inmediatas para garantizar la vida y la dignidad, y el acceso a bienes y servicios de primera necesidad de personas que han sido víctimas de la guerra y de otras catástrofes y que siguen llegando a costas europeas.

De igual modo, instamos a la ciudadanía a unirse en la búsqueda de soluciones sostenibles para esta crisis humanitaria desde la solidaridad y velando por la seguridad de las personas que se encuentran atrapadas en condiciones inhumanas tras abandonar sus lugares de origen en busca de un futuro mejor.

Lesbos es una de las islas de la costa noreste griega del Egeo que afrontan un incremento de los flujos migratorios junto a Kastelorizo, Karpathos, Agathonisi y Symi. Esta última -que recibe actualmente el mayor número de personas refugiadas desde el inicio de la crisis en 2015- cuenta solamente con un médico para más de 3.000 residentes y miles de turistas y refugiados. Por ello, Médicos del Mundo se ha hecho cargo allí de una parte importante de la atención médica.

No hay seres humanos ilegales. Nos hay excusas para más muertes de personas hacinadas en incendios o jugándose la vida en el mar. Por ello, también hacemos un llamamiento a la Unión Europea para que asuma sus responsabilidades en materia de asilo respete el derecho internacional humanitario y garantice vías legales y seguras y condiciones dignas de acogida para las personas que buscan un futuro para sí mismas y sus hijos e hijas.