Millones de personas sirias dependen de un paso fronterizo que podría cerrarse
Millones de personas sirias dependen de un paso fronterizo que podría cerrarse
Pedimos al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que el próximo 10 de julio renueve las disposiciones de la resolución del paso transfronterizo al menos por 12 meses más, para asegurar la ayuda humanitaria a la población siria
Es crucial garantizar el acceso de la ayuda alimentaria, medicamentos esenciales y bienes humanitarios básicos
La guerra de Ucrania, una fuerte sequía, el alza del precio de los alimentos y once años de guerra dejan a Siria en un estado crítico
7 de julio de 2022.- La vida de millones de personas sirias depende de la crucial decisión que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas tiene previsto tomar el próximo domingo día 10 sobre la renovación de la resolución del paso transfronterizo, con el que se asegura el acceso de la ayuda humanitaria a más de cuatro millones de personas en el norte de un país que afronta ya once años de una guerra devastadora.
Nuestra organización llama a que se garantice la renovación de las disposiciones de esta resolución transfronteriza durante al menos doce meses más, para garantizar que millones de sirios sigan teniendo acceso a ayuda alimentaria, medicamentos esenciales y otros bienes humanitarios básicos. “No podemos estar debatiendo si se mantiene un paso fronterizo abierto o no, de ello depende la vida de millones de personas en el norte de Siria”, explica Hakan Bilgin, presidente de Médicos del Mundo Turquía.
¿Qué sucede si no existe un paso para la ayuda humanitaria en el noreste del país?
Sin material sanitario
Este acceso es esencial para la entrega de suministros médicos y quirúrgicos. Estos artículos sanitarios son fundamentales para la población que reside en el noroeste de Siria, de la cual 2,8 millones es desplazada interna y vive en campamentos o asentamientos que carecen de una atención sanitaria adecuada. Además, la mayoría de los productos farmacéuticos y vacunas esenciales no pueden ser adquiridos por las ONG sin la ayuda de la ONU a través de esta frontera, en un contexto de espacio humanitario cada vez más reducido en el que el personal sanitario sigue siendo objetivo de ataques.
La falta de disponibilidad y acceso a suministros médicos, la falta de personal sanitario sirio cualificado y de acceso a la educación especializada, más las deficientes infraestructuras, han convertido el acceso a la asistencia sanitaria en un gran reto en Siria.
Sin alimentos
Solo el Programa Mundial de Alimentos proporciona sustento a 1,4 millones de personas cada mes. Si no se renueva la resolución transfronteriza, estos suministros solo serán suficientes hasta septiembre de 2022, después de lo cual un millón de personas se quedarán sin ayuda alimentaria en el noroeste de Siria. El año pasado, más de 9.500 camiones cruzaron a Siria por el paso transfronterizo de Bab al-Hawa con ayuda alimentaria, medicamentos y bienes para responder a necesidades urgentes.
Sin trabajo de ONG
Además de la asistencia alimentaria y de refugio que se ha habilitado a través de las agencias de la ONU mediante este paso transfronterizo, la resolución también autoriza la capacidad de la ONU para apoyar financieramente a programas y socios en las zonas no controladas por el Gobierno a través del Fondo Humanitario Transfronterizo de la ONU para Siria. Si no se renueva la resolución, las ONG humanitarias sirias no autorizadas por el Gobierno, que son las principales receptoras del Fondo, perderían el acceso y por tanto no podrían desarrollar sus programas.
De cuatro pasos fronterizos a uno
Si la ampliación del acceso transfronterizo era vital el pasado año, hoy es aún más crítica. El conflicto en Ucrania, el alza de los precios de los alimentos, la peor sequía de las últimas siete décadas y una guerra que se prolonga ya once años tiene hoy un impacto muy negativo en la seguridad alimentaria en todo el país.
Desde que en 2014 se adoptara la Resolución 2165 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU), millones de personas que viven en el noroeste de Siria han podido recibir asistencia humanitaria, coordinada por Naciones Unidas. Esta resolución habilitó cuatro pasos fronterizos que sin embargo fueron reducidos a solo uno en 2020: el de Bab al-Hawa, que es hoy la única alternativa. Este paso ofrece un enlace entre la provincia de Idlib y Turquía y permite la entrega de ayuda humanitaria en el norte de Siria.
Ahora, este próximo domingo día 10, el CSNU se reúne para decidir si prorroga o suspende la Resolución 2165 y con ello asegurar o no la entrada de ayuda humanitaria a Siria.
Un cierre de frontera vulnera el derecho internacional
Denunciamos que el cierre de las fronteras y pasos transfronterizos vulnera los principios humanitarios y el derecho internacional humanitario, y amenaza la vida de millones de personas que dependen de la ayuda humanitaria externa para sobrevivir.
Tras once años de conflicto, el número de personas sirias que dependen de la ayuda humanitaria está en su nivel más alto: 14,6 millones (seis millones son mujeres y 5,5 millones menores). En el noroeste de Siria esta cifra creciente alcanza actualmente los 4,1 millones, 700.000 personas más que el año pasado según cifras de ONU. La respuesta humanitaria proporcionada por la ONU a través de esta frontera representa el 80% de la ayuda alimentaria en el noroeste de Siria. Ni la respuesta dirigida por las ONG ni las operaciones transfronterizas son capaces actualmente de proporcionar esta ayuda necesaria.
La Red Internacional de Médicos del Mundo hace un llamamiento a los representantes de sus gobiernos y, en particular, a los embajadores de China, Francia, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos ante las Naciones Unidas para que tomen las medidas necesarias para abogar por garantizar el acceso humanitario en Siria.
Qué hace Médicos del Mundo en Siria
Médicos del Mundo trabaja en el acceso a la salud, y en especial en atención primaria, en la provincia de Alepo desde 2008, en colaboración con la Media Luna Roja Árabe Siria (SARC). Con el estallido de la guerra, Médicos del Mundo adaptó su respuesta para garantizar el acceso a la salud más fundamental de la población, en un contexto muy complejo de numerosos actores, acceso limitado, ataques directos al personal y a las instalaciones sanitarias y necesidades masivas. La ONG trabaja en red con organizaciones locales en Siria y en países cercanos con refugiados sirios.
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