Nos solidarizamos con el personal sanitario en Nicaragua

Al parecer, el motivo de estos despidos ha sido aparentemente “en represalia por participar en protestas o expresar de otras formas sus diferencias con el Gobierno”, según han señalado organizaciones como Human Rights Watch.

Desde Médicos del Mundo consideramos que las represalias contra el personal sanitario no son aceptables ni jurídica ni éticamente. Pero, además, estas medidas están afectando negativamente a los servicios de salud en un momento crítico para el país, y dificultan el ejercicio de este derecho por parte de la ciudadanía.

En su último informe, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) subraya que los Estados no deben impedir que el personal sanitario facilite tratamientos a quienes lo necesitan. No debe permitirse la detención u hostigamiento al personal sanitario por el hecho de prestar atención médica y tampoco se debe castigar a estos profesionales por la realización de actividades compatibles con la ética médica, ni obligarle a cometer actos que contravengan tales normas.

En Médicos del Mundo entendemos la salud como un derecho humano fundamental y recordamos la responsabilidad de los gobiernos de garantizar el acceso a la atención sanitaria de calidad, de acuerdo a las necesidades de la población, y no condicionada por variables de índole político o social. Por ello consideramos que se siguen vulnerando el derecho a la salud y a la protección de la integridad física, psíquica y moral de la población nicaragüense.

Nuestra organización, que lleva trabajando en el país desde hace 20 años, ya expresó en un comunicado del pasado mes de junio su consideración de que el derecho a la salud estaba en riesgo en Nicaragua.