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Ucrania: decisiones políticas para evitar el sufrimiento humano

Fotografía: Varias organizaciones

Ucrania: decisiones políticas para evitar el sufrimiento humano

Estimados señores presidentes Putin y Trump:

Ahora que todos los ojos están puestos en el resultado de su reunión del 16 de julio en Helsinki, las 6 organizaciones humanitarias que trabajamos en el este de Ucrania firmantes, queremos dirigirnos a ustedes y pedirles que utilicen su influencia con las partes en conflicto para aliviar el sufrimiento de esta crisis humanitaria.

Cuatro años de conflicto se han cobrado la vida de más de 2.000 civiles y han tenido un alto precio en la capacidad de las personas para hacer frente a esta crisis, ya que la situación socioeconómica ha empeorado gravemente: 3.4 millones de personas necesitan asistencia humanitaria en el este de Ucrania.

 

A continuación hay tres mensajes clave para apoyar su posición en la crisis de Ucrania. Su influencia en las decisiones relacionadas con esos puntos provocaría un cambio positivo para la población afectada por el conflicto:

La población y las infraestructuras civiles no son un objetivo

En un conflicto armado, los civiles y las infraestructuras no pueden ser el blanco de los ataques. El derecho internacional humanitario también obliga a las partes en el conflicto a tomar todas medidas de precaución factibles para evitar, y en todo caso reducir al mínimo, la pérdida accidental de vidas civiles y los daños a bienes civiles y a la población.

En otras palabras, las áreas residenciales no pueden ser utilizadas como escudo. Del mismo modo, las infraestructuras civiles utilizadas para proporcionar a la población servicios esenciales, tales como agua, electricidad y gas, no debe ser atacadas ni puestas en peligro de ser dañadas o destruidas como resultado de presencia militar cercana.

Solo en 2017, la Donetsk Filtration Station -que suministra agua a 345.000 personas a ambos lados de la línea de contacto- se ha visto interrumpida 35 veces y fuera de servicio durante 51 días debido a los enfrentamientos. Desde el comienzo del conflicto, nueve trabajadores de compañías de agua que operaban y reparaban instalaciones murieron y 25 resultaron heridos. Es alarmante que 45 escuelas hayan sido dañadas o destruidas desde principios de 2017.

Permitan que la ayuda llegue

La ayuda humanitaria suele ser la única esperanza para las personas atrapadas en el conflicto. Debe garantizarse la ayuda a través de más organizaciones humanitarias en las Áreas No Controladas por el Gobierno (NGCA por sus siglas en inglés). Más de dos millones de personas necesitan hoy asistencia, pero el acceso limitado a la misma hace que las necesidades no sean cubiertas. Desde el año pasado los picos de inseguridad alimentaria casi se han duplicado en estas áreas.

Aseguren la libertad de movimiento

Las personas que solían vivir interconectadas en la misma región, Donbas, han sido separadas desde el comienzo del conflicto por una línea de 500 km de longitud, la línea de contacto. Las familias se dividieron, las empresas se vieron afectadas y el acceso a los servicios se redujo significativamente. Con alrededor de 800.000 personas desplazadas internamente al Área Controlada por el Gobierno y más de dos millones de personas que necesitan asistencia en ella, un millón de personas cruzan cada mes a través de la línea de contacto. Las personas se desplazan a través de la línea para obtener pensiones, ver sus propiedades, acceder a documentación, obtener servicios de salud o reencontrarse con sus seres queridos. Para ello tienen que esperar durante horas, a menudo en condiciones climáticas extremas, en viajes que pueden durar más de un día y llegar a ser muy caros. Muchas personas se dan por vencidas al cruzar, fomentando la separación. Se necesitan cruces adicionales entre el Gobierno y las zonas controladas no gubernamentales, en particular en la región de Luhansk, donde solo hay un punto de cruce para peatones.

Las organizaciones abajo firmantes estamos preocupadas por el costo que las hostilidades ejercen sobre civiles y sus estructuras. Por tanto, les instamos presidentes, Putin y Trump, a que utilicen su influencia para promover acciones de todas las partes envueltas en el conflicto y abordar las preocupaciones mencionadas y, por tanto, mejorar en gran medida la vida cotidiana de las personas afectadas por el conflicto.