Voluntariado: el ADN de Médicos del Mundo

El voluntariado está en el ADN de Médicos del Mundo. Personas críticas, empáticas y comprometidas con una sociedad más justa. Personas profesionales que entregan su tiempo y conocimientos con el fin de que todas y todos podamos disfrutar de nuestros derechos. Desde Extremadura a Siria, pasando por Honduras, Mozambique o Melilla. Las personas voluntarias trabajamos aquí y allí, porque en todos los lugares del mundo hay personas viviendo una situación vulnerable. Hoy, Día Internacional del Voluntariado, Médicos del Mundo celebramos y reconocemos el esfuerzo de cientos y cientos de personas voluntarias en el mundo.

Desde hace más de tres décadas, esta ONG está formada por personas voluntarias comprometidas con mejorar la vida de las personas. Desde pensar en estrategias de incidencia política e intervención, hasta salir a la calle con unidades móviles a trabajar con colectivos vulnerabilizados. Creemos que el voluntariado aporta y nos aporta como asociación.

Además, desde 2018 Médicos del Mundo formamos parte del programa de voluntariado europeo EU Aid Volunteers, con el que hasta ahora hemos podido desplegar a 76 personas en 15 países donde trabajamos. El voluntariado ha formado parte de los equipos locales, aportando sus experiencias y conocimientos en áreas administrativas, de gestión, sanitarias o de comunicación, entre otras. Hoy vamos a conocer a algunas de estas personas voluntarias: ¿qué es el voluntariado para quienes forman parte de Médicos del Mundo?

Es liderazgo local

Como personas voluntarias en otros países, aprendemos del activismo de la sociedad local, de su liderazgo y resiliencia en situaciones muy vulnerables. Las personas voluntarias en organizaciones internacionales nos sumamos al trabajo que ya han andado las personas locales para juntas trabajar por un cambio social. Aprender de estas personas locales, que son las que mejor conocen la situación, debe ser el eje sobre el que gire el voluntariado.

Es un trabajo profesional

Entendemos el voluntariado como una actividad profesional, con una planificación, unos objetivos y un trabajo cualificado, pues la responsabilidad social que tenemos para con la sociedad merece una respuesta lo más profesional posible.

Es una sociedad crítica

La experiencia como voluntarias y voluntarios nos convierte en personas más críticas, empáticas y sensibles con la sociedad y con las situaciones de vulnerabilidad que nos rodean. Hacer voluntariado en una organización es una experiencia vital clave para formar a una sociedad más consciente y justa, involucrada en un cambio social.

Es nuestra responsabiliadad

El voluntariado, la cooperación internacional y la solidaridad es responsabilidad de toda la sociedad. Tenemos la responsabilidad de conocer, denunciar y participar en situaciones de injusticia. Involucrarnos en estas situaciones, a través de nuestro trabajo, de la denuncia y de la participación, es la forma que tenemos de contribuir a una sociedad más justa, donde todos y todas podamos vivir en igualdad de derechos.