Tras más de dos años de conflicto y frente a la constante degradación de la situación en Siria, la Red Internacional de Médicos del Mundo refuerza sus actividades en el terreno, en condiciones de extrema emergencia.
A 300 kilómetros al noroeste de Kidal y a pocos pasos de la frontera argelina, el municipio de Tinzawatène afronta desde hace días un flujo constante de familias desplazadas.