Fijar un nuevo rumbo para Gaza

Madrid, 13 de abril de 2015.- Tras unos niveles de destrucción y sufrimiento sin precedentes en 2014, los donantes internacionales se comprometieron a aportar 3.500 millones de dólares, así como a cambiar de estrategia. Seis meses después, las labores de reconstrucción y recuperación apenas han comenzado, no se han rendido cuentas por las violaciones del derecho internacional y Gaza sigue aislada de Cisjordania.

 La Operación Margen Protector (nombre en clave con el que Israel se refiere a los 51 días de operación militar que comenzó el 8 de julio de 2014 y al consiguiente conflicto entre Israel, Hamás y otros grupos armados palestinos) ha infligido un nivel de destrucción y sufrimiento humano sin precedentes, suponiendo además la tercera gran operación militar de este tipo en un periodo de seis años.

Poco después del alto el fuego, los principales donantes de todo el mundo se reunieron en El Cairo donde se comprometieron a destinar 3.500 millones de dólares para la reconstrucción de la franja. Sin embargo, hasta el momento no se han desembolsado más del 26,8% de los fondos comprometidos; la mayoría de los 81 hospitales y clínicas que resultaron damnificados aún carece de los fondos necesarios para su reconstrucción y los pocos que cuentan con financiación carecen de los materiales necesarios para proceder con la reconstrucción. A día de hoy, 100.000 personas aún están sin hogar y muchas viven en campamentos provisionales o escuelas.

Por estas razones, 46 organizaciones internacionales hemos publicado hoy el informe “Fijar un nuevo rumbo: superar el estancamiento en Gaza” exigiendo a los líderes mundiales que apliquen un nuevo enfoque a la hora de abordar las causas que subyacen al conflicto. Los donantes deben insistir en la consecución de un alto el fuego permanente, en la rendición de cuentas por parte de todas las partes implicadas por las constantes violaciones del derecho internacional y en el fin del bloqueo israelí que aísla a 1,8 millones de palestinos y palestinas en Gaza, separándoles de Cisjordania. El informe señala que la mayoría de los donantes, en lugar de cuestionar el bloqueo, aceptan soluciones que lo soslayan.