Revista de Médicos del Mundo nº 60 Diciembre 2025. 35 aniversario
sumario
04 EN PORTADA 35 ANIVERSARIO
08 NUESTRO TRABAJO ALLÍ TÁCHIRA, VENEZUELA
09 NUESTRO TRABAJO AQUÍ BIZKAIN BIZI
10 DESDE MI VENTANA EN RABUNI
12 OPINIÓN DIARIO DE SARA POR MIKEL AYESTARÁN
13 ENTREVISTA XOSÉ RAMIL
14 IV CONGRESO DE ACCESIBILIDAD A LOS SISTEMAS PÚBLICOS DE SALUD
15 CAMPAÑA LA AYUDA NECESITA AYUDA
35 AÑOS MÁS SI HACE FALTA, HASTA QUE LA SALUD SEA UN DERECHO GARANTIZADO PARA TODAS LAS PERSONAS
Era febrero de 1990 cuando nacía la asociación Médicos del Mundo en España con una idea muy clara: defender el derecho a la salud de todas
las personas y no ser impasible ante el sufrimiento humano y la injusticia.
En aquellos años, la epidemia del VIH estaba siendo devastadora en nuestros barrios. Muchas personas desconocían cómo se transmitía aquel virus que estaba directamente relacionado con sus hábitos y comportamientos. Además, estas personas arrastraban un estigma previo que, con el sida, les dejó aún más expuestas a la discriminación social y a sobrevivir fuera de los márgenes de los sistemas social y sanitario.
Desde el primer año entendimos que su realidad nos interpelaba directamente. Así fue como iniciamos el trabajo acompañando a personas con VIH —hombres homosexuales, jóvenes adictos a la heroína y otras drogas inyectadas, o mujeres en situación de prostitución— con información, prevención y apoyo empático.
Al mismo tiempo, en la región de los Grandes Lagos, estallaba un conflicto que dejó millones de víctimas y una herida que, 30 años después, aún no se ha cerrado. Allí junto a las comunidades afectadas, vivimos uno de los momentos más dolorosos de nuestra organización: los asesinatos de Flors, de Manuel y de Luis, imborrables en nuestra memoria.
Lo mismo ocurrió en los Balcanes, donde la guerra golpeaba a la población civil y vulneraba gravemente sus derechos. Allí perdimos también a Mercedes, asesinada en nuestra oficina de Mostar. Su memoria forma parte de quienes somos parte de esta organización.
En aquellos primeros años también pusimos en marcha nuestro primer proyecto de atención materno-infantil en Mauritania. Y comenzaron a nacer las primeras sedes autonómicas, una red nacional que hoy es una de nuestras grandes fortalezas en España: trabajar cerca de las personas y en los lugares donde más se nos necesita.
Recordar estos inicios es importante porque en ellos se consolidan señas de identidad que han seguido alimentando el pensamiento, el desarrollo y las estrategias que siguen guiándonos: situarnos donde se vulnera el derecho a la salud aquí o en cualquier parte del mundo, defender una única bandera —la de los derechos humanos—; y construir una organización fuerte y arraigada en el territorio donde
trabajamos a través del voluntariado y del trabajo profesional.
35 años después reconocemos la visión de nuestra primera presidenta, Pilar Estébanez, fallecida hace cuatro años y a quien hoy recordamos. Su impulso ayudó a que la organización creciera asentada en dos pilares que siguen siendo complementarios y esenciales: un voluntariado comprometido y exigente, y un equipo profesional que aporta rigor, experiencia y dedicación.
Hoy contamos con más capacidades y aprendizajes, pero también con un contexto global actual que amenaza derechos que dábamos por
consolidados.
Desde Médicos del Mundo responderemos con la determinación de nuestros primeros años y con la madurez que da la experiencia. Sabemos que los desafíos son complejos, pero también sabemos que es posible avanzar hacia sistemas de salud más justos y accesibles.
Seguiremos trabajando sin miedo y sin desesperanza, con la convicción de que los derechos se defienden todos los días. Lo haremos con el rigor y la persistencia que nos caracteriza, otros 35 años más si hace falta, hasta que la salud sea un derecho garantizado para todas las personas.
Pepe Fernández Díaz
Presidente de Médicos del Mundo
