La salud mental es el hilo que lo une todo. La casa, el trabajo, la familia. La salud mental atraviesa cada acto de nuestro día a día y hace que podamos estar más o menos presentes, con más o menos salud, más o menos vivos. ¿Pero qué sucede cuando una guerra marca tus últimos cuatro años de vida? ¿Cómo adaptarse a la situación para poder seguir viviendo en medio de la alerta? ¿Qué papel juega la salud mental en la resiliencia?
Mujeres ucranianas nos comparten su situación actual de vida y el papel tan importante que ha jugado el cuidar de la salud mental a nivel personal y profesional en sus vidas.
Tetiana Hordiienko, exdirectora del centro de veteranos Veteran Pro de salud mental en Ucrania
Hace un año que Tetiana Hordiienko asumió la responsabilidad de crear un lugar de apoyo para los veteranos y sus familias. En casi 4 años de guerra, Ucrania ha movilizado cientos de miles de efectivos, y muchos de ellos eran y son civiles. Esta mujer ucraniana vio la necesidad de crear un espacio de calor, salud mental, apoyo y resiliencia, en un contexto duro en el que la guerra marca fuertemente la salud de un pueblo entero.
Lo hizo en Brovary, una ciudad cercana a Kiev. Durante un año trabajó sin descanso por y para la salud mental de sus conciudadanos. Su vida se convirtió en un maratón interminable de trabajo y voluntariado. Viajes, recaudación de fondos, ayudar a los demás -todo capturado en cientos de fotos en sus redes sociales-. Hasta que cuidado tras cuidado, un día Tetiana se dio cuenta de que la salud mental que no podía más era la suya propia. Sus momentos personales casi habían desaparecido. Y se preguntó: “¿Dónde estoy en mi propia vida, en medio del caos interminable de las tareas cotidianas?» Y cabe añadir: ¡y en mitad de una guerra!
Y por eso mismo decidió soltar. Fue difícil porque este espacio para veteranos y sus familias se había convertido ya en parte de su identidad, pero la salud mental no espera y ella tomó una decisión valiente: cuidarse.
Pero incluso con una salud mental herida, Tetiana tomó este proceso vital como una oportunidad para ayudar a gente que como ella sentían que no podían más. Tetiana se formó en salud mental con las formaciones que Médicos del Mundo hace a actores clave como personal de salud, comunitario y profesorado entre otros. Formación, técnicas, sesiones, ejercicios prácticos… Tetiana trabajó su salud mental y se formó también para ayudar a los demás. Ella lo llama el «efecto dominó»: cuando una persona se cuida a sí misma genera un cambio a su alrededor. Desde un cambio personal al crecimiento de toda una comunidad.
Viktoriia Ovsiannikova, futura enfermera familiar de la región de Jarkiv
Viktoriia Ovsiannikova es la primera cara que un paciente ve al llegar al centro de salud. Detrás del ingente volumen de papeles y trámites administrativos de esta secretaria, se esconde la sensibilidad de quien reconoce a pacientes que llegan con una salud mental herida tras casi 4 años de guerra.
Consciente de ello y gracias a su afán de aprender y ser útil, Viktoriia llegó a Médicos del Mundo para formarse: quería contribuir a mejorar la salud mental de sus vecinos desde la primera ventanilla del centro de salud. Así que se unió a casi todas las formaciones disponibles en Médicos del Mundo en Ucrania: primeros auxilios, primeros auxilios psicológicos, gestión del estrés, el programa Help+, etc. «Estos cursos me dieron confianza -cómo hablar con la gente, cómo notar cuando alguien necesita apoyo y cómo responder sin juzgar-«, explica.
Y entonces esta experiencia le cambió la vida: «Vi lo importante que es que las personas en el primer nivel de atención comprendan la salud mental. Cuando alguien se siente mal, suele acudir primero a su médico o médica de cabecera, no a psiquiatría. Y si ese profesional sanitario no sabe cómo ayudar, la persona se queda sola con su problema”, apunta. Fue entonces cuando tuvo una revelación: volver a la facultad, esta vez para convertirse en enfermera familiar y aplicar en la práctica los conocimientos adquiridos en salud mental.
«Muchos aún reaccionan con cautela a la palabra psiquiatra. Pero cuando una enfermera simplemente les habla, escucha, explica, entonces se abren. Por eso quiero trabajar en consulta familiar, donde puedo ayudar pronto, antes de que el problema crezca«, añade.
Como Médicos del Mundo, nos llena de orgullo contribuir a la formación en salud mental de actores clave como son estas dos mujeres en la guerra de Ucrania. La formación que han recibido genera ya un efecto dominó en su comunidad. Cuidadoras que cuidan en medio de una guerra, cuidan de ese hilo que lo une todo y que es la salud mental.
Este trabajo es posible gracias al apoyo financiero de la Dirección General de Protección Civil y Ayuda Humanitaria de la Unión Europea.