© Cintia Sarría
La violencia de género afecta a las mujeres de muchas maneras. Además de las consecuencias físicas: heridas, lesiones, problemas gastrointestinales o incluso la muerte; también tiene efectos en la salud sexual y reproductiva y, por su puesto, en la salud mental de mujeres que han sufrido violencia.
Sabemos por nuestra experiencia trabajando con supervivientes que el impacto es profundo. El trauma por violencia puede producir ansiedad, depresión, insomnio, estrés postraumático y más condiciones que les dificultan rehacer sus vidas cuando consiguen salir de esas situaciones.
La violencia también deja heridas invisibles
Uno de los factores de riesgo más presentes para la salud mental es la violencia de género y otras situaciones que pueden desencadenarse a partir de estos episodios como vivir en situación de calle o el abuso del consumo de sustancias. Y aunque las heridas psicológicas no se ven, condicionan cada decisión, cada relación y cada paso en el camino a recuperar sus vidas. Reconocerlas es el primer paso para sanar.
En Médicos del Mundo creemos que la violencia de género es una violación de los derechos humanos y por eso trabajamos para prevenirla, detectarla, denunciarla y brindar atención a las víctimas, incluyendo atención de salud mental a las mujeres que la han sufrido.
El acceso limitado a atención psicológica en contextos de exclusión
Para muchas mujeres, pedir ayuda no es tan fácil como parece y, aunque la pidan, muchas veces no la encuentran. Sobre todo, las que viven en contextos más vulnerables.
La exclusión sanitaria que sufren tantas personas migrantes y en riesgo de exclusión, debido a las barreras administrativas, las deja fuera del sistema y les impide acceder a los recursos de salud mental de la sanidad pública. A esto se suman otro tipo de barreras:
- Barreras económicas: dificultad para asumir el coste tratamientos, medicación y pruebas necesarias
- Barreras estructurales: problemas para conseguir la derivación a servicios de salud mental o retraso en las citas
- Barreras físicas: falta de accesibilidad a los centros de salud
- Falta de información y adaptación cultural: es muy importante en la atención de salud mental que está rodeada de tanto estigma y donde es fundamental entender el contexto cultural y antecedentes del paciente.
Todo esto hace que en los contestos de exclusión social, la salud mental se convierta en un lujo y deja a las mujeres que han sufrido violencia de género más desprotegidas.
Cómo ayuda Médicos del Mundo a reconstruir la salud mental de mujeres que han sufrido violencia
Además de trabajar en la prevención de violencia hacia mujeres migrantes o en riesgo de exclusión social y en educar sobre las diferentes formas de violencia a profesionales que trabajan con las víctimas, también brindamos atención directa a mujeres expuestas a situaciones de violencia como las supervivientes de mutilación genital femenina o mujeres en situación de prostitución.
Nuestro equipo ofrece apoyo psicosocial y recursos de recuperación emocional a mujeres que han sufrido estas situaciones de violencia:
- Sesiones individuales para atender cada caso de manera personalizada.
- Grupos terapéuticos donde pueden compartir sus experiencias, crear comunidad y encontrar apoyo entre ellas mismas
- Apoyo psicosocial y legal que les permite acceder a sus derechos y comenzar el camino de reconstrucción
- Espacios seguros donde cada mujer puede hablar sin miedo y recuperar su autoestima.
Nuestro proyecto para la erradicación de la mutilación genital femenina atendió en 2024 a 1115 mujeres residentes en 13 municipios de España y provenientes de más de 50 países, principalmente de Nigeria, Mali, Senegal, Gambia y Marruecos. En esta labor es fundamental el trabajo de las mediadoras, que acompañan a las supervivientes en todo el proceso de recuperación y garantizan que reciba el apoyo psicosocial que necesitan.
Médicos del Mundo también apoya a las mujeres en situación de prostitución y trata con fines de explotación sexual. En 2024 atendimos a 15 602 personas en situación de prostitución, de las cuales el 99% eran mujeres y, entre esas intervenciones, incluimos el apoyo psicológico y terapia a 1845 mujeres y atención psicológica especializada a 23 adolescentes como parte de nuestro programa de prevención en infancia y adolescencia tutelada.
Llevamos 30 años trabajando para apoyar a las mujeres en situación de prostitución y víctimas de trata y en este tiempo nuestra acción ha evolucionado para brindar una atención más completa. Comenzamos únicamente trabajando en la prevención de VIH y otras enfermedades de transmisión sexual, pero hoy en día además de distribuir condones y todo tipo material preventivo e informativo, también ofrecemos atención médica, jurídica, sociolaboral, de acceso a la vivienda y, por supuesto, psicológica.
Esta intervención completa es fundamental para el bienestar psicológico y la salud mental de las mujeres en situación de prostitución y las víctimas de explotación sexual y trata, ya que, sin un empleo digno, una vivienda y el completo acceso a todos sus derechos no pueden vivir tranquilas.
Dona para que una mujer pueda empezar de nuevo
En Médicos del Mundo entendemos la salud mental como la define la Organización Mundial de la Salud (OMS):: “un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad”. Por ello trabajamos para acompañar a las personas que sufren y brindarles una atención completa que cubra múltiples necesidades.
Trabajamos con las personas en contextos de exclusión social para que puedan acceder a los recursos de salud mental de la sanidad pública y, al mismo tiempo, apoyamos a los profesionales sociosanitarios para que puedan detectar, prevenir, derivar y tratar adecuadamente los casos de salud mental, incluyendo las mujeres y víctimas de violencia de género.
Tu ayuda es el primer paso para que una mujer reconstruya su vida y su salud. Con tu apoyo, podemos ofrecer atención psicológica, espacios seguros y herramientas para que ninguna mujer vuelva a sentirse sola en el esfuerzo por reconstruir su vida.
Actúa ahora. Haz tu donación y defiende el derecho a la salud mental de todas las mujeres.